Ya se platica mucho de Regata acá y allá. Se antoja difícil asistir a una que vaya a superar a la anterior, pero la de Huatulco tiene sabor a Oaxaca, sabor a Océano Pacífico, sabor a hospitalidad, sabor a camaradería, sabor a naturaleza virgen, sabor a honestidad.
Empezando porque el organizador, nuestro amigo Heriberto es de lo mas afable y tranquilo. Con toda la presión de la logística, nunca se le vio angustiarse. Sabiendo lo cautivador del lugar, que compite con las mejores bahías del mundo, se desenvuelve con humildad Hautulqueña. Y para quienes no sepan lo que es eso, les referimos que es la población mas honrada de todo el país. Allí no se pierde nada. Donde lo dejas allí se queda. Lo pudimos comprobar. También es la población mas servicial, de trato directo, muy jovial pero concentrada en su quehacer sea servicio, guía o ayuda.
Heriberto y su socia Lea, han sabido poner en el mapa, no con poco trabajo, la gran oferta de paisaje, deporte y naturaleza que el sitio ofrece. Aguas de una transparencia y claridad impecables, contorno costero que permite desplazarse en grandes burros o jugar cerca de las rocas en el rebote y remezcla de olas, con vistas hacia objetivos variados de playas, islas y lugares de reposo. Eso, en agua repleta de barriletes, atunes, camarones y aves en su persecución, con el avistamiento aquí y allá de delfines, ballenas, peces espada o mantarrayas.
En ese entorno paradisíaco, que no pide nada a los de las islas polinesias, se organizó esta regata explotando sus adornos. Se partió de la Bahía de Sta Cruz, plácida y sin peros, con agua tranquila, que al abrirse te presenta reto interesante de olas de fondo que chocan con los riscos laterales. Se continuó hacia la Isla Cacaluta, y se rodeó en sentido inverso a las manecillas del reloj, para retornar y seguir mas allá a la Isla Montosa y luego la Tortuga, y de regreso a Sta Cruz.
Todo ocurrió con al menos 4 lanchas de apoyo que discretamente se movían cuidando a los 40 kayakeros que participábamos. Al resguardo de la trayectoria, kayakeros de río, expertos extremos, importados de Halcomulco evitaban el acercamiento a rocas o lugares peligrosos. Todo ocurrió tal y como Heriberto lo explicó en la junta de aclaraciones del día anterior, en un mapa muy grande que era parte de la lona del presídium.
La seguridad, acompañamiento, cuidados y precauciones fueron impecables. Desde luego se contó con el apoyo municipal, de turismo, de la Marina, y protección civil. La ambulancia asistió pero no fue requerida. Fue muy claro que para las autoridades el realce que este evento puede tener en la promoción turística, es importante, y fueron consecuentes.
Apuntalaron el evento con conferencias sobre cuidado a nuestros mares y acciones específicas para todos, y otras de motivación para hacer de los jóvenes alpinistas o deportistas exitosos. Las playeras de manga larga, fueron de esas que uno si quiere usar. Sirven exactamente para lo que somos. Ligeras, de secado rápido con puños que cierran bien y con un trabajo de diseño que dejó pocos espacios sin pintar.
Con colegas, entrañables amigos de Canadá, EUA, la Paz, Tulancingo, Toluca, Querétaro, Coatzacoalcos, Tuxtla Gutiérrez, Tabasco, se vivieron un par de días intensos y muy cordiales. A los madrugadores les tocó show de ballenas a distancia de la mano. A los otros nos tocaron eventos gastronómicos, empezando con el desayuno, que solo allí saben preparar.
A Querétaro regresamos muy contentos, con el primer lugar absoluto masculino por parte de Gustavo Mier, y con 4 triunfos de los kayaks Mayan Seas. De la Paz Isa Higuera fue 1er lugar femenino, Gustavo Villavicencio 1er lugar master. De Chiapas Carlos Guardia y su esposa 1er lugar dobles 15 kms. De Coatza Benjamín Albores primero senior y Ramón y Martín Hernández primero dobles de 15 km. De 6 premios 5 fueron de Mayan Seas. Un Waakski que sigue ganando regatas, 2 Veracruz, un Mandinga, un Cancún (doble) y un Tabasco (doble).
Regresamos muy contentos y satisfechos, pero los dos grandes ganadores fueron Heriberto y Huatulco. Ya tienen clientes cautivos.
Nos vemos en la próxima. Un palazo a todos.
Cayucochief.
